Sat. Dec 21st, 2024

Un informe de la Fundación Observatorio PyME advierte que, pese a un leve repunte industrial, el 62% de las PyMEs enfrenta caídas en ventas y un 41% soporta alzas en insumos. Además, se frena la creación de nuevas empresas, afectando el crecimiento del empleo y la productividad.

Una reciente encuesta de la Fundación Observatorio PyME revela un panorama complejo para las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) en Argentina, a pesar de un leve repunte en la actividad industrial durante los últimos tres meses. El informe correspondiente al tercer trimestre de 2024 muestra que, aunque ciertos sectores lograron cierta estabilidad, el 62% de las PyMEs industriales continúa reportando caídas significativas en sus ventas, y un 41% enfrenta aumentos constantes en los costos de insumos.

Las PyMEs industriales, las más afectadas

El análisis destaca que la caída de la demanda es uno de los principales obstáculos que enfrentan las PyMEs industriales. Además del descenso en las ventas, que afecta a más de la mitad de estas empresas, un 53% señala subas en los costos salariales, complicando aún más su situación. Los retrasos en los pagos por parte de los clientes (32%) y los aumentos en los precios de los insumos (41%) están afectando la rentabilidad del sector, que ya se encontraba en una situación delicada.

Contraste con el sector de software y servicios informáticos

En contraste, las empresas de software y servicios informáticos (SSI) presentan un panorama menos desalentador. El informe señala un aumento del 11% en ventas en términos deflactados y un incremento del 3% en la ocupación. No obstante, el 59% de las empresas del sector continúa enfrentando márgenes de rentabilidad bajos, lo que indica que, aunque la actividad crece, persisten problemas de rentabilidad.

Desaceleración en la creación de nuevas PyMEs

Uno de los datos más preocupantes del informe es la desaceleración en la creación de nuevas empresas en 2024, especialmente en el sector industrial. Si bien las empresas del sector de software han mantenido un crecimiento moderado, la falta de nuevas PyMEs está afectando la productividad y la expansión del empleo. Esto genera un impacto negativo en la economía, ya que el crecimiento de la fuerza laboral en el país depende en gran medida del dinamismo de las pequeñas y medianas empresas.

Las perspectivas para las PyMEs argentinas siguen siendo desafiantes, con un contexto económico que limita tanto el crecimiento como la rentabilidad, pese a los intentos de recuperación en ciertos sectores.