El exministro de Transporte cuestionó las declaraciones de la exministra de Seguridad, destacando que nunca expresó tales opiniones durante el gobierno de Mauricio Macri.
La interna del PRO sumó un nuevo capítulo de tensiones. En respuesta a las recientes críticas de Patricia Bullrich hacia la gestión de Cambiemos, Guillermo Dietrich, exministro de Transporte y aliado cercano de Mauricio Macri, señaló que durante los cuatro años en que ambos compartieron Gabinete, Bullrich no expresó desacuerdos similares. “Fueron dos reuniones por semana durante todo el mandato, y no recuerdo que plantearas críticas de esta índole”, afirmó Dietrich, en un mensaje dirigido a la exministra de Seguridad.
Bullrich había declarado que, si bien la gestión macrista tuvo “muchas cosas buenas”, en otros aspectos “le hizo muy mal a la Argentina”. Dietrich, sorprendido por estas palabras, recordó cómo tanto Macri como Marcos Peña respaldaron su labor en momentos críticos, como en el Caso Maldonado. “Mauricio y Marcos bancaron tu gestión frente a una fuerte presión pública”, agregó, destacando la unidad que el Gobierno mostró durante esos años.
La disputa expone divisiones en el PRO y abre interrogantes sobre su futuro
El cruce entre Bullrich y Dietrich refleja una creciente fractura dentro del PRO, que se intensifica en un contexto de negociaciones sobre una posible alianza con La Libertad Avanza (LLA). En los últimos días, Bullrich ha lanzado críticas hacia el macrismo, enfocándose en la represión policial y otros temas sensibles, generando respuestas desde el sector más cercano a Macri.
A esto se suma el desacuerdo interno sobre el temario de las sesiones extraordinarias del Congreso, donde las diferencias dentro del partido amarillo han escalado. Desde el oficialismo, calificaron los planteos del PRO como “fuera de lugar”, avivando aún más la tensión.
Con estos enfrentamientos, el futuro del PRO parece incierto. La división interna plantea preguntas sobre su capacidad para unificarse de cara a los próximos desafíos electorales, especialmente en un contexto donde las alianzas con LLA podrían redefinir el panorama político nacional. El desenlace de esta crisis interna será clave para el rumbo del partido y su influencia en la política argentina.