El Frente Renovador reclamó un lugar clave en el armado del peronismo provincial y no descarta una lista propia. Este martes, la reunión en Matheu podría definir el rumbo del espacio.
A dos semanas del cierre de alianzas, el peronismo bonaerense entra en una etapa decisiva. Sergio Massa encabezó una videoconferencia con más de 300 dirigentes provinciales donde dejó en claro que el Frente Renovador no aceptará un rol secundario. “La unidad se construye con generosidad”, afirmó, en un mensaje directo a los sectores liderados por Máximo Kirchner. Incluso deslizó la posibilidad de presentar una tercera lista si no hay acuerdo, y propuso abrir el diálogo a sectores del radicalismo enfrentados con La Libertad Avanza.
Mientras tanto, el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), alineado con Axel Kicillof, busca consolidar su peso territorial con plenarios seccionales, aunque exige que el resto de los espacios “se ordenen” antes de sentarse a negociar. Massa, por su parte, pidió una junta electoral única y una estructura consensuada que contenga al Frente Renovador, al kirchnerismo y al MDF. Respaldó la centralidad de Kicillof en el armado, pero insiste en reglas claras y una integración real.
Este martes, en la sede del PJ bonaerense, se reunirán representantes del FR, La Cámpora, el MDF y el justicialismo para definir el marco legal de la alianza, con el 9 de julio como fecha límite. Facundo Tignanelli y Rubén Eslaiman lideran las conversaciones. Además, Massa propuso una estrategia electoral “digital y 2.0”, centrada en redes sociales y en ejes como empleo, seguridad y pymes. El encuentro en Matheu podría marcar el inicio de una síntesis o acelerar una fractura.