La ministra de Seguridad apuntó contra el expresidente por el rechazo del Senado a los jueces propuestos por Milei para la Corte Suprema. Lo acusó de actuar por rencor y tildó la maniobra de “vendetta total”.
Patricia Bullrich responsabilizó a Mauricio Macri por la caída en el Senado de los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, los candidatos que el presidente Javier Milei había impulsado para ocupar cargos en la Corte Suprema. En declaraciones públicas, la ministra de Seguridad sostuvo que el expresidente “se unió al kirchnerismo” para bloquear los nombramientos y calificó la jugada como una “vendetta total y absoluta”.
“Le dio el quórum al Senado, lo hizo por bronca, no por inteligencia”, expresó Bullrich, quien acusó a Macri de no tolerar que al Gobierno libertario “le vaya bien”. La funcionaria también lo responsabilizó directamente por haber influido en los senadores del PRO, que acompañaron el rechazo a los pliegos junto con bloques de la UCR y Unión por la Patria. Según dijo, su actitud responde al “rencor” y a una resistencia a reconocer los logros del oficialismo.
La votación en la Cámara alta terminó en una derrota clave para el Ejecutivo, que apostaba a consolidar su proyecto judicial con el ingreso de nuevos jueces a la Corte. Aunque García-Mansilla ya había jurado, su permanencia está en duda tras la decisión del Senado. En tanto, Lijo nunca asumió porque no consiguió la licencia en su cargo actual y su designación quedó trabada.
Bullrich vinculó el revés parlamentario con la interna entre Macri y Milei, que viene escalando desde hace semanas. Las diferencias políticas se combinan con disputas por el control del PRO y las candidaturas de cara a las elecciones 2025, especialmente en la Ciudad de Buenos Aires. La ministra sugirió que el expresidente estaría obstaculizando al Gobierno como parte de una estrategia personal.
En medio del conflicto, el juez de la Corte Ricardo Lorenzetti también intervino en el debate. Si bien consideró “respetable” la decisión del Senado, cuestionó los nombramientos por decreto: “Yo nunca aceptaría ser designado así”, sostuvo. El Gobierno, por su parte, ratificó que los decretos tienen validez hasta noviembre de 2025 y anticipó que resistirá la presión legislativa. Mientras tanto, el futuro de la Corte sigue envuelto en incertidumbre.