El juez Casanello pidió buscar más de 50 palabras clave y todas las conversaciones del ex presidente con los imputados por el presunto direccionamiento de contratos de seguros durante su gestión.
La Justicia dispuso un nuevo análisis del celular del ex presidente Alberto Fernández en el marco de la investigación por presuntas irregularidades en la contratación de seguros durante su mandato. Aunque el dispositivo había sido abierto semanas atrás en otra causa, ahora los peritos deberán revisar chats y archivos en busca de términos clave como “broker”, “póliza” o “PAS”, además de nombres de exfuncionarios y supuestos intermediarios. El peritaje también incluirá todas las conversaciones de Fernández con imputados en la causa, como su histórica secretaria María Cantero y el broker Héctor Martínez Sosa.
El teléfono y la tablet del ex mandatario habían sido secuestrados en agosto de 2023 por una denuncia de violencia de género de Fabiola Yañez, su expareja. En ese expediente, el juez Julián Ercolini ordenó semanas atrás extraer todo el contenido de sus aplicaciones de mensajería. Ahora, en paralelo, el juez Sebastián Casanello pidió a la DATIP que analice esos mismos dispositivos en busca de pruebas sobre el direccionamiento de contratos, una maniobra que habría beneficiado a empresas como Bachellier, que solo en 2022 cobró más de $700 millones en comisiones.
Según el expediente, Fernández habría tenido control directo sobre la selección de intermediarios en los seguros contratados por organismos estatales. En la investigación ya se secuestraron más de 100 teléfonos; 40 aún siguen sin desbloquearse. Las pericias anteriores revelaron vínculos estrechos entre el ex presidente y varios involucrados. En su defensa, Fernández deslindó responsabilidades en su secretaria Cantero, aunque admitió no poder garantizar que ella no haya actuado por su cuenta. Esa afirmación marcó el quiebre de su relación con Martínez Sosa.